La retracción de la actividad es generalizada y no depende del sector.La actividad en el sector de la construcción en Santa Fe confirma la caída que anunció días atrás el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Roberto Pilatti, tesorero de la delegación Ciudad de Santa Fe de la Cámara Argentina de la Construcción (CAC), sostuvo que, según informes, los permisos para obra privada en la ciudad fueron la mitad que los presentados en 2011. Y la expectativa que recogemos de nuestros asociados es que este año no sería mejor que 2012, lamentablemente.Según Pilatti, las empresas socias de la CAC Santa Fe han reducido hasta un 30 por ciento sus plantas de personal. Es una consecuencia lógica del retroceso de la actividad.Los problemas en el sector comenzaron a acumularse desde que el gobierno decidió restringir la compra de moneda extranjera, habitual medio de pago en las transacciones inmobiliarias y refugio ante las variaciones en la cotización del peso. Los primeros síntomas se sintieron en el mercado de compra y venta de inmuebles, que a su vez arrastró una menor expectativa en materia de construcción. Los inversores no arriesgan una apuesta en pesos con costos salariales y de materiales creciente, y demanda deprimida.”Estamos esperando revertir la situación, pero no depende exclusivamente de los constructores”, manifestó Pilatti.