En el Día Mundial del Medio Ambiente, el Municipio realizó el cierre de esta campaña de la que participaron 46 escuelas de nuestra ciudad. El secretario de Ambiente y Espacios Públicos, Mariano Cejas; y el diputado Nacional, Niky Cantar, participaron de la premiación de los establecimientos que más recolectaron. Fue en el Parque de la Constitución Nacional, donde además se realizó una plantación de árboles junto a una delegación del seleccionado de Fiji, que participa del mundial de rugby U20.
Esta mañana, en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, el Municipio premió a las escuelas que participaron de Ecolegio, una iniciativa en la cual alumnos de 46 escuelas de la ciudad recolectaron casi 1.800 kilos de tapitas y botellas de plástico para su posterior reciclado. El Parque de la Constitución Nacional, uno de los espacios verdes recuperados en estos años y que está junto al río, fue el escenario ideal para esta jornada que reunió a cientos de chicos y jóvenes, y de la que participaron el secretario de Ambiente y Espacios Públicos, Mariano Cejas; y el diputado Nacional, Niky Cantar, como así también docentes y directivos de los establecimiento educativos que participaron de la jornada.
“Me quedo con lo que decía una de las profesoras: la formación, el cambio cultural del respeto al otro y el cuidado del ambiente, es lo mejor que podemos hacer para preservarlo. No podemos estar pensando cada 10 años en crear un nuevo relleno sanitario, que tiene su vida útil; sino en cómo cambiamos y modificamos la forma de generar la basura”, destacó Niky Cantard.
Recordó el estudio “que hicieron hace muy poco las universidades con respecto a los plásticos tirados y cómo contaminan la belleza de nuestros ríos. Por eso Ecolegio es un trabajo bárbaro, y lo más importante, sin duda alguna, es la conciencia que toman los chicos, que son los que a su vez terminan enseñando los buenos hábitos a sus padres en sus casas”, resaltó Cantard.
Con el ejemplo
Los protagonistas fueron los chicos, que contaron cómo fueron juntando tapita a tapita, botella a botella, involucrando a cada una de sus familias para se sumaran a este verdadero trabajo en equipo. “Para mi es importante, para enseñarles a nuestros padres que lo que ellos creen que no se puede reciclar, sí se puede reciclar. Que puede ser destinado a una obra, que pueda servir en lugar de tirarlo a la calle o en un lugar que pueda contaminar”, resumió Abril, una de las alumnas de la escuela Nuestra Señora de Guadalupe que participó de Ecolegio.
Vale recordar que las escuelas de la ciudad fueron convocadas a través de las secretarías de Ambiente y Educación para participar de este concurso que consistía en juntar envases de plástico y, por separado, tapitas. Se inscribieron 46 escuelas de la ciudad, tanto públicas como privadas. El martes se reunieron en la plaza San Martín donde se hizo el pesaje correspondiente y a cada escuela se le entregó un ticket con los kilos que juntaron.
Entre juegos didácticos sobre el reciclaje y la conservación del medio ambiente, objetivo de la actividad, los alumnos también concretaron la plantación de árboles junto a una delegación de la selección de rugby de Fiji, que participa del World Rugby U20 Championship Argentina 2019 que se realiza en nuestra ciudad y que quisieron sumarse a la actividad. “Esto es muy importante para nuestro futuro, porque si no cuidamos el medio ambiente, no vamos a tener un futuro que sea agradable”, señaló Elijah Kuilamu, ala del equipo oceánico, mientras los chicos lo buscaban para sacarse una selfie.
Compromiso
El secretario de Ambiente y Espacios Públicos, Mariano Cejas, valoró el compromiso y la participación de las escuelas que se sumaron a Ecolegio y que permitió que se recolectaran cerca de 1.800 kilos de tapitas y botellas plásticas. “Cuando hablamos de la celebración del Día del Ambiente, uno tiene la imagen de las grandes extensiones de bosques y reservas de agua dulce, pero lo más importante en esto, es que para llegar realmente a resguardar esta casa, que es el planeta Tierra, tenemos que empezar por aquellas cosas mínimas, que son las actitudes de cada uno”.
Destacó sobre la propuesta: “Es algo chiquitito, que es recolectar el plástico y las tapitas, y que tiene que ver con una conducta ciudadana; y donde elegimos a los chicos porque son los que más difunden y los que dan el ejemplo”. Pero además, calificó lo hecho como un mensaje de “la propia ciudad de Santa Fe, aprovechando la red de Mercociudades, donde hay más de 300 localidades que están siguiendo esta misma iniciativa. Son estas cosas chicas, que cuando se suman y aporta a un trabajo en red tienen un resultado muy importante”, resaltó.
Esta es una actividad que se realizó al mismo tiempo en todas las localidades que son parte de Mercociudades. En las 349 ciudades miembro, de 10 países del continente entre los que están Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay, Venezuela, Chile, Bolivia, Ecuador, Perú y Colombia, se recolectó plástico como una medida de concientización.
Articulación docente
Paula Julierac, de la escuela de Comercio “Domingo Silva”, una de las docentes que participó de la actividad relató: “Veníamos trabajando la separación de residuos hace tiempo y nos pareció una muy buena propuesta. Los chicos se engancharon muchísimo, lo trabajamos desde la asignaturas, porque tiene todo un contexto de contenido sobre recursos y aprovechamiento; y la verdad que para nosotros fue una muy buena experiencia a nivel educativo”.
Asimismo, contó cómo a partir de un trabajo que lleva “cinco años en la materia de Laboratorio, con los primeros años de la escuela, se extendió al resto de la comunidad”, y les permitió juntar 135,3 kilos de plásticos. “Para nosotros fue mucho, porque fue poco el tiempo desde que nos enteramos, y sobre todo fue importante la finalidad, sabiendo que las tapitas van a Cenaele y la botellas Diginidad y Vida Sana.
Cabe señalar que las tapitas serán enviadas al Centro de Asistencia al Enfermo de Leucemia (Cenaele), con quien el Municipio ya viene trabajando en la recolección; en tanto las botellas plásticas serán recuperadas por la asociación Dignidad y Vida Sana que trabaja en la planta de recuperación del relleno sanitario.
Las escuelas premiadas
Con 169,4 kilos, la escuela primaria de Nuestra Señora de Lourdes fue la institución que más envases y tapitas recolectó. El premio consistió en una computadora de escritorio. En tanto, el segundo premio fue para el secundario de la Escuela Superior de Comercio Domingo Guzmán Silva (135,3 kilos). En este caso el premio fueron dos tablets y una impresora láser. El tercer premio (un micrófono y una Tablet) fue para la escuela Nuestra Señora de Fátima, nivel primario, que recolectó 120,3 kilos.