ste año estará terminado en
Funes, el primer hotel sustentable de la región y el único de construcción metálica en Argentina. Se trata del complejo
“Sol de Funes”, ambicioso proyecto que se levanta en zona rural, sobre un terreno de 4 hectáreas, lindero al
Club de Campo
Kentucky
en la vecina localidad. Allí ya asoma la imponente estructura de un hotel de 100 habitaciones y 35 casas de alquiler y 15 departamentos.“La obra está a la vista y actualmente se está trabajando en los cerramientos. Al contar con una estructura metálica, se redujeron los tiempos de construcción”, explicó a
punto bizNéstor Rozín, empresario y desarrollador del novedoso emprendimiento, que casi no tiene antecedentes en el país.
Sol de Funes
cuenta con más de 10.000 m2, predio que albergará además de las habitaciones, tres salones de eventos, pileta olímpica, área deportiva con canchas de fútbol y tenis, spa antiage, consultorios médicos y un coqueto restaurante.
El proyecto tiene un marcado compromiso con el medio ambiente y el entorno. Tal es así que el desarrollo contempla el tratamiento de las aguas residuales y la creación de barreras forestales que absorban los ruidos y minimicen la contaminación acústica. Como dato, unas 4.500 árboles se disponen para el predio del hotel y otras 1.400 en la zona de loteo. Y esto se trata de arbolado de calles, avenidas internas, de ingreso, laterales y en espacios recreativos.
Pero la construcción metálica es
sin dudas la marca registrada de
Hotel y Casa de Campo Sol de Funes; un método que según sus desarrolladores reduce los tiempos de obra, y que es considerado un sistema de vanguardia más limpio que permite ahorro de espacio.
En cuanto al mercado al que está destinado,
Sol de Funes
apunta a captar distintos tipos de inversores para renta. “Es una inversión atractiva tanto para un perfil de público de la tercera edad como parejas jóvenes, y hasta jugadores o técnicos de fútbol que sólo viven algunas semanas al año en la ciudad y el resto del tiempo destinan la unidad para alquiler”, remarcó
Rozín, sobre el complejo
que se levanta antes del ingreso a
Funes, por autopista Rosario-Córdoba.
El acceso principal al predio se realiza por medio de la colectora que nace del nudo existente en la intersección entre la Ruta Nacional 9 y la Ruta 34.