Henk Jonkers, de la Universidad Técnica de Delft, en los Países Bajos, ha diseñado un nuevo tipo de concreto con la capacidad de arreglar sus propias grietas.No importa qué tan cuidadosamente se mezcle o se refuerce, todo el concreto eventualmente se agrieta, y bajo ciertas condiciones, esas grietas pueden dar lugar a un colapso.El profesor Henk Jonkers de la Universidad Técnica de Delft en los Países Bajos ha ideado una forma completamente nueva de darle al concreto una vida más prolongada.”Hemos inventado el bio-concreto; se trata de concreto que se repara a sí mismo con el uso de bacterias”, dice.El bio-concreto se mezcla como el concreto regular, pero con un ingrediente extra: el “agente de reparación”. Permanece intacto durante la mezcla y únicamente se disuelve y se activa si el concreto se agrieta y el agua entra.El concreto es extremadamente alcalino y las bacterias “curativas” deben esperar inactivas durante años antes de que se activen por medio del agua.Los investigadores eligieron las bacterias del bacilo para el trabajo, ya que prosperan en condiciones alcalinas y producen esporas que pueden sobrevivir durante décadas sin alimento ni oxígeno.Cuando finalmente las grietas comienzan a formarse en el concreto, el agua entra y abre las cápsulas.Las bacterias luego germinan, se multiplican, forman calcita o piedra caliza, y eso cierra las grietas.Ahora Jonkers espera que su concreto podría ser el inicio de una nueva era de edificios biológicos.”Si somos capaces de implementarla en los materiales, en realidad podemos beneficiarnos de ella, así que creo que este es un muy buen ejemplo de cómo unir los entornos de la naturaleza y de la construcción en un nuevo concepto”.