El presidente Mauricio Macri anunciará este viernes un paquete de medidas para aliviar el impacto de la inflación en los deudores de créditos hipotecarios que se ajustan por UVA y para dar impulso a la construcción. Una de las medidas que trascendió es un tope a la cuota de estos créditos si la inflación crece 10% por encima del índice de salario. El monto por encima de ese techo se podrá pagar cuando la relación se invierta y los salarios le ganen a la inflación.
Además de los créditos hipotecarios, en el paquete —que tendrá unas nueve medidas— se incluirá el relanzamiento del sistema Procrear y planes de viviendas sociales. Aunque aún no está definida la modalidad, el anuncio lo realizará el propio presidente, probablemente desde la residencia de Olivos y luego habría una conferencia de prensa con el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, y el secretario de Vivienda, Iván Kerr.
En el último año, hubo distintos proyectos de ley promovidos por la oposición para amortiguar el impacto de la inflación y la devaluación entre quienes tomaron un préstamo hipotecario UVA. Pero, a diferencia de las medidas que analiza el Gobierno, se basaban en la creación de “fondos compensadores”.
Actualmente, la alternativa que tienen los deudores frente a una suba elevada de las cuotas es solicitar al banco la extensión del crédito original, a través de una cláusula en los contratos que se activa en caso de que la inflación supere por más de 10 puntos al aumento de los salarios.
La aplicación de medidas de alivio dependerá de la evolución que en los próximos meses tenga la inflación minorista (reflejada en el índice UVA) frente al aumento de los salarios, cuya evolución publica mensualmente el INDEC a través del Coeficiente de Variación Salarial (CVS).
Cuando surgieron los créditos hipotecarios UVA, en marzo de 2016, fue para muchos una opción “alcanzable” para llegar a la vivienda propia, con un plazo de hasta 30 años y una cuota similar a un alquiler que se actualizaba por inflación.
En ese momento, el escenario de que los salarios perdieran más de 10 puntos contra la inflación parecía muy lejano: en las últimas décadas, la única vez que los salarios perdieron más de diez puntos contra la inflación fue en 2002, en la crisis posterior al estallido de la convertibilidad.
El mayor impacto sobre la cuota mensual de los préstamos UVA podría llegar en noviembre, cuando se refleje la inflación de septiembre, estimada por algunas consultoras en 7%. Según cálculos privados, la inflación se ubicaría en 45% en todo 2018, pero es poco probable que los salarios aumenten por encima del 35 por ciento.
Con todo, según las cifras del Banco Central, por ahora el nivel de morosidad de los deudores de créditos hipotecarios bajo la modalidad UVA es muy bajo. De acuerdo con los datos oficiales, apenas 0,2% del stock total presenta algún grado de morosidad. Y cuando se analiza el comportamiento de aquellos que recibieron un crédito UVA hace por lo menos un año y medio, el ratio de morosidad se eleva hasta aproximadamente 1,5 por ciento.
En el último mes, los requisitos para acceder a un crédito hipotecario UVA, para un dos ambientes promedio usado en Capital Federal con un valor de USD 115.000 (unos $4.485.000) exigen un ingreso que se acerca a los $90.000. Este es el caso de un préstamo del Banco Nación, que cubre el 80% del valor de la propiedad a 30 años con una cuota inicial de $22.916.
Así, el otorgamiento de estos créditos hipotecarios viene en baja. Las estadísticas del Colegio de Escribanos porteño reveló que en agosto apenas 14% de las ventas de inmuebles se realizaron con hipotecas. En el mejor momento, a fines de 2017, esta relación se acercó al 40 por ciento.
Fuente: infobae.com