Se trata de la instalación de 1,2 millones de paneles, y, según se anunció, será el único parque en el ámbito nacional e internacional en el que las comunidades indígenas son socias, no sólo en las ganancias, sino a lo largo de todo el proceso constructivo.
Con el inicio de los trabajos, en la localidad jujeña de Caucharí, a 4.000 metros por encima del nivel del mar, se ocuparán 600 hectáreas de tierras pertenecientes a la comunidad aborigen Terma de Tusle y va a generar más de 500 puestos de trabajos directos y 1.000 indirectos.
El parque tendrá una potencia instalada inicial de 300 megavatios y podrá dar abastecimiento a unos 100.000 hogares con una inversión que rondará los u$s 480 millones proveniente de China y de un bono suscrito en Nueva York por inversores internacionales en septiembre pasado.
En la apertura oficial de las obras estuvieron también representantes chinos, ya que la construcción de la planta estará a cargo de la firma Shangai Electric Power Construction, una subsidiaria de Powerchina, especializada en el sector energético.
La zona en la que será emplazada la planta es considerada una de las áreas con mayor radiación solar del planeta.