La Municipalidad de Rosario logró que 115 nuevos edificios implementen métodos de construcción que reducen hasta un 80 por ciento el consumo energético usado para climatizar. Entre edificios de viviendas y comercios suman cerca de 450 mil metros cuadrados cubiertos en la ciudad.Desde 2013, cuando empezó a regir la Ordenanza 8757 creada a partir del trabajo en comisión de distintas facultades de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y los colegios profesionales, se estableció una obligación progresiva para quienes tramitan permisos de obras.Además del ahorro que significa en materia energética, aplicar estos métodos disminuye las patologías y reduce el mantenimiento de las estructuras.“Rosario es la primera y única ciudad del país en implementar medidas para la disminución del consumo de energía en la construcción de los edificios”, recordó la directora del programa, la arquitecta Ana Paula Lattuca.Si bien la adecuación a la normativa tiene un costo superior al tradicional, la incidencia del mismo es mínima en relación al ahorro energético que puede llegar hasta el 80 por ciento según el caso. Aplicar una doble pared, incorporar una aislación térmica en el techo o simplemente buscar una mejor orientación para las aberturas fueron y son algunas de las recomendaciones que se surgen desde la Municipalidad de Rosario.Estas modificaciones reducen la cantidad de patologías por condensación superficial e intersticial, lo que lleva a gastar menos en tareas de mantenimiento. También revaloriza el último piso en edificios de vivienda de propiedad horizontal por el aumento de la resistencia térmica del techo, algo que se propone a la mayoría de las construcciones en la actualidad.