Un favorable avance tecnológico desarrollado con el fin de agregarle valor a un residuo muy frecuente en diferentes industrias relacionadas con los alimentos.El Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) desarrolló en el último año una materia prima que, mediante el procesado y aprovechamiento del carbonato de calcio de la cáscara de huevo de gallina, sirve para la fabricación de pinturas.El proyecto elaborado en conjunto entre el Centro INTI-San Luis, a través de su Unidad Técnica de Medio Ambiente, y el Centro INTI-Procesos Superficiales logró realizar el correcto tratamiento de las cáscaras de huevo, que implicó el lavado, la reducción del tamaño y disminución de la carga orgánica (en su mayoría láminas o excrementos) y así obtener el Carbonato de Calcio (CaCO3) para reuso industrial.Las pinturas están compuestas por resina, por otra parte sólida que contiene los pigmentos, por solventes que permiten el mezclado y, también, por aditivos. El CaCO3 forma parte de los elementos sólidos y se utiliza como carga en la elaboración de las pinturas para otorgarle más peso, permitiendo que una vez pintada la superficie, el producto final tenga mayor poder cubritivo.